San Sebastián de Palmitas
El Corregimiento de San Sebastián de Palmitas se ha conservado en el tiempo como el corregimiento más rural de Medellín. Visitarlo representa una experiencia, sobre todo, para valorar los productos y cultivos de la tierra: naranja agria, chontaduro, guayaba, naranjo, aguacate, limón, cidra, caña de azúcar, café; entre otros.
En la Casa de los Arboleda es posible aprender técnicas agroecológicas que no son dañinas con el ambiente, así como hacer camping o visitar una cascada con una caída de cinco metros. En la Finca El Vergel de los diferentes métodos en la producción del café como la garrucha y el secado al vapor.
El Trapiche Fredy Cano es el lugar del corregimiento que representa una tradición que ha identificado el corregimiento, la siembra de la caña de azúcar para la elaboración de la panela.
Además, a través del Mirador El Tambo y gracias a su ubicación, se puede observar el proceso de nacimiento de las nubes, además de disfrutar del encuentro de las corrientes cálidas que suben desde las riberas con frías ventiscas que descienden desde lo más alto de la montaña.
Red de caminos de San Sebastián de Palmitas
Los caminos prehispánicos y los caminos de herradura transformados en profundos canalones por el peso de las cargas y los caminos de la colonización española, como el Camino del Virrey, más anchos para poder transitar con comodidad a caballo y con carrozas; son una muestra de los caminos de piedra que han labrado la historia de los pobladores de San Sebastián de Palmitas y que han permitido que los tradicionales arrieros del corregimiento a mula y caballo, pudieran llevar productos cultivados en el corregimiento para ser comercializados en Medellín.
Red de miradores de San Sebastián de Palmitas
El Corregimiento de San Sebastián de Palmitas está ubicado sobre un gran complejo montañoso, que permite desde cualquier punto visualizar la panorámica del territorio. Entre estos miradores se destacan El Alto de la Cruz, El Chuscal, El Morrón, La Popa y El Ventiadero.
Camino a la vía del mar se pueden observar también panorámicas de los límites del corregimiento con el municipio de Ebéjico y el Occidente antioqueño; son lugares tranquilos y silenciosos por medio de los cuales se puede interactuar con la naturaleza, la flora y la fauna que los rodea.
¿Dónde es y cómo llegar a San Sebastián de Palmitas?
San Sebastián de Palmitas es un corregimiento de Medellín que se encuentra al noroccidente de la ciudad, en las puertas del occidente antioqueño, de hecho limita al norte con el municipio de San Jerónimo. Por el oriente con el Corregimiento de San Cristóbal y por el sur con el de San Antonio de Prado.
Para llegar en bus a San Sebastián de Palmitas existen dos rutas, las de Sotraurabá, que salen desde la Terminal del Norte en tres horarios cada día y la de Transportes San Cristóbal que se toma en el Centro de Medellín y cuenta con siete horarios cada día.
La distancia desde el Centro de Medellín hasta San Sebastián de Palmitas es de aproximadamente 22 kilómetros y el costo promedio del trayecto para el 2020 es de 35.000 COP, 9,10 USD. Desde el barrio Laureles la distancia es más o menos la misma, así como el costo promedio del trayecto.
La distancia desde El Barrio El Poblado, uno de los más populares entre los visitantes, es de 27 kilómetros y el costo promedio del trayecto para el 2020 es de 45.000 COP, 11,70 USD.
Qué hacer
Es un camino que todavía se utiliza, cuenta con más de cincuenta años al servicio de la comunidad que permite el paso de mulas que van cargadas de caña. Es una travesía en las veredas La Frisola, La Aldea y La Volcana. Se observa durante su recorrido vegetación nativa, bosque mixto, rastrojo bajo y alto, plantaciones de caña, cebolla y café. El camino tiene tramos en muy mal estado por el paso de los animales (le hace falta adecuación y mantenimiento); se encuentran nacimientos de agua que son afluentes de la quebrada La Sucia.
El templo fue la primera capilla de San Sebastián, es una edificación muy sencilla en su disposición espacial que, prácticamente, no dispone de ninguna ornamentación arquitectónica. Presenta un buen estado de conservación. Sobresale de su estructura la presencia de muros de tapia revocados en su parte inferior con cemento. El piso actual es baldosa de cemento, en sustitución del antiguo piso de tierra pisada. La construcción constituye un buen ejemplo de la arquitectura tradicional religiosa colombiana.
Mirador natural de donde se puede apreciar el valle del Río Cauca y los municipios de San Jerónimo y Santa Fe de Antioquia; durante su recorrido se encuentra la vía al túnel de Occidente, vegetación nativa en poca escala, rastrojo bajo y plantaciones de caña, cebolla y café entre otros. Es uno de los lugares que también se utiliza como mirador de atardeceres. Su cercanía con la vía que conduce hacia el occidente lo afecta con el alto grado de contaminación de material particulado del parque automotor, además también está al lado de la vía que conduce a otras veredas del corregimiento
Es una finca cafetera representativa en el sector de producción agrícola del corregimiento, que genera dos cosechas durante el año las cuales son vendidas a clientes del territorio quienes posteriormente las comercializan en los diferentes municipios.
La gallera se ubica en la vereda La Aldea, se accede a ella después de un recorrido de aproximadamente 20 minutos saliendo de la parte central del corregimiento. La gallera funciona hace un poco más de diez años. Los apostadores que llegan a la gallera deben llevar su gallo y hacer un aporte mínimo para el pago del juez, los espectadores también pueden apostar; la gallera ofrece también a sus clientes billar y maquinitas.
El templo se caracteriza por su sencillez espacial y formal, presenta un buen estado de conservación en sus diferentes elementos constitutivos, más allá de la simplicidad que presenta en su estructura, el templo se presenta como un conjunto armónico desde los elementos ornamentales de su fachada los cuales lo hacen sobresalir en el contexto urbano.
La casa antigua Las Bastidas es una construcción que existe desde el año 1896, aún conserva mucha de su estructura original, como el techo, los corredores, las puertas, ventanas y muros en tapia. Sus dueños conservan las escrituras originales de la propiedad donde se reporta que la construcción estaba ubicada en un sector llamado Las Vueltas. Su último comprador la dejó como herencia a su esposa e hijos quienes actualmente la utilizan como finca de recreo. Está adornada por un hermoso jardín que da un ambiente aún más tradicional a la casa y está rodeada por amplias zonas verdes.
El trapiche funciona hace 60 años aproximadamente. Es una actividad productiva heredada de años atrás por la familia de los Muñoz Muñoz. Para llegar a este lugar se atraviesa un camino de herradura, se observa vegetación mixta, sembrados de caña, café y cebolla.
El Alto de la Cruz se encuentra a la orilla de la vía al Mar, frente al conjunto de estaderos localizados en la entrada al casco urbano del corregimiento. Su nombre se debe a una cruz que había en la cima del cerro, pero que ya no existe. En el alto de la cruz se destaca la actividad agrícola y pecuaria, combinada con explotaciones maderables puntuales en su mayoría de pino pátula; la intervención del área ha sido total y la pre- sión por la expansión de la frontera agrícola es muy evidente, lo que ha desplazado en su totalidad las condiciones naturales de protección y conservación del sitio.
El Morrón es un importante sector poblado de la vereda La Sucia donde habitan 80 familias aproximadamente, desde allí se tiene una bella panorámica hacia la parte central del corregimiento, la vereda La Frisola, el Alto de Boquerón, el municipio de Sopetrán y el corregimiento de San Antonio de Prado. Este mirador no se encuentra cerca a ninguna vía principal, la contaminación por smog es muy poca debido a la poca frecuencia de vehículos por el lugar y por la numerosa vegetación que allí se encuentra. En esta zona hay presencia de cultivos de hortalizas los cuales necesitan un amplio uso de agroquímicos que contaminan las quebradas.
La parte baja del cerro se caracteriza por una notable intervención humana, con una cantidad importante de asentamientos rurales dedicados a las actividades productivas, en su mayoría agrícolas, lo que para esta parte generó la modificación drástica de las condiciones naturales del sitio, consecuencia de la explotación de los diferentes recursos naturales, desplazando así la fauna y flora nativa. De igual manera, la actividad humana ha traído consigo alteraciones a los recursos naturales, como la afectación a las fuentes de agua por descargas directas y escorrentía superficial de aguas negras, abonos y/o fertilizantes; construcciones y modificación del paisaje.
La parte baja del cerro se caracteriza por una notable intervención humana, con una cantidad importante de asentamientos rurales dedicados a las actividades productivas, en su mayoría agrícolas, lo que para esta parte generó la modificación drástica de las condiciones naturales del sitio, consecuencia de la explotación de los diferentes recursos naturales, desplazando así la fauna y flora nativa. De igual manera, la actividad humana ha traído consigo alteraciones a los recursos naturales, como la afectación a las fuentes de agua por descargas directas y escorrentía superficial de aguas negras, abonos y/o fertilizantes; construcciones y modificación del paisaje.
El Mirador natural El Ventiadero se encuentra ubicado sobre la vía que conduce a las veredas La Frisola y La Suiza; allí se observa bosque nativo y secundario además marca el límite de estas dos veredas. Desde aquí se aprecia una amplia panorámica de Ebéjico y el corregimiento de San Antonio de Prado, así como Santa Fe de Antioquia, Sopetrán, San Jerónimo y parte del valle que forma el Río Cauca. En esta zona se encuentran cultivos de caña de azúcar y cebolla. En el Mirador hay presencia de escombros y basuras que dan un muy mal aspecto al lugar, además de postes de luz que generan una obstrucción visual.
La quebrada La Frisola es un afluente de la quebrada La Sucia, que desemboca en el Rio Cauca. Durante el recorrido que esta realiza hasta su desembocadura se puede observar un bosque natural intervenido con plantaciones de caña, café y otros cultivos. Para llegar a la quebrada La Frisola se transita por un camino de herradura y posteriormente se atraviesa un puente construido hace más de 50 años con una reforma en cemento ya que el que existía antes era de madera y se encontraba en muy mal estado.
Nace en el Alto Del Chuscal y desemboca en la quebrada La Sucia, recorre el corregimiento en dirección Oriente – Occidente; de ella se abastece del agua para el consumo humano la vereda Urquitá. Se encuentra rodeada de vegetación y árboles nativos lo que contribuye a la belleza paisajística del sitio, durante su recorrido forma charcos en los que sus visitantes se pueden bañar.
La quebrada La Sucia nace en el Cerro del Padre Amaya, en la vereda que La Sucia hace un corto recorrido y en el puente que lleva este mismo nombre se une con la quebrada La Volcana, formando de modo natural espectaculares bal- nearios que son frecuentados por personas de la localidad. A lo largo de estas quebradas se observan gigantescas piedras que unidas a la fuerza con la que baja el agua, ofrecen al visitante unos agradables sonidos que hacen aún más atractivo este espectáculo natural. En su recorrido abastece tanques avícolas en los Gaiteros. Las condiciones en las que se encuentra el agua no son óptimas, lo que da origen a su nombre.
Está ubicado entre las veredas La Aldea y La Potrera, vía Túnel de Occidente, 1 kilómetro y medio en carro. Luego caminando. El mirador está frente a la vía que conduce hacia el occidente, la cual es bastante transitada lo que genera mucha contaminación con material particulado del parque automotor, material que, por efecto del viento, llega hasta este lugar. En el sitio no hay presencia de basuras, sin embargo, hay obstrucción visual por la construcción del cable (garrucha). Se puede observar diversidad de flora y fauna en el mirador, además de contar con una agradable vista panorámica.
Esta caída de agua de 20 mts. aproximadamente se ubica a un costado de la nueva carretera al mar, 4 km después de cruzar el túnel Fernando Gomer Martínez, el lugar presenta factores contaminantes provenientes de los vehículos que circulan constantemente por el sitio, sin embargo, tiene una belleza paisajística que se puede recuperar a través de algunas intervenciones.
En el Alto El Chuscal se encuentra el nacimiento de la quebrada Misserenga, además es visitado por la panorámica que ofrece de Santa Fe de Antioquia, Ebéjico, San Jerónimo y el corregimiento de Palmitas; asimismo porque en su alto se encuentra una Virgen en la cual se hacen celebraciones religiosas, especialmente en el mes de mayo. El atractivo se encuentra inmerso dentro de un área densamente poblada e intervenida, limitando su condición natural. Aunque cuenta con paisajes y vistas muy atractivas, no hay una riqueza natural representada en fauna y flora que lo complementen.
La quebrada La Volcana es una de las más importantes a nivel de todo el Corregimientos de San Sebastián de Palmitas, irriga este territorio de oriente a occidente, vierte sus aguas en la quebrada La Frisola, la cual a su vez es afluente de la quebrada La Sucia que define el límite occidental del corregimiento antes de desembocar en el Río Cauca. La Quebrada ofrece dos lugares de charcos, uno junto a la vía y otro cerca al cementerio y el camino de arriería; este segundo lugar tiene un área plana que lo posibilita como zona de camping con una capacidad de hasta 25 carpas.
Luz Elena Galeano, artesana desde hace unos nueve años, habita con su espo- so y sus dos hijas en la vereda La Aldea del corregimiento de San Sebastián de Palmitas, vive en una casa construida en adobe y cemento, techos en madera y teja de barro. Luz Elena utiliza materiales como: alambre, papel, medias veladas, semillas, cartón paja, arcilla y chaquiras pequeñas con los cuales da formas a bolsas, arreglos florales, animales, manillas, collares y bonsáis; además es contratada para hacer arreglos en celebraciones de bautizos, primeras comuniones, matrimonios, etc.
San Sebastián de Palmitas fue paso obligado de españoles, colonos y arrieros que transitaban por caminos prehispánicos desde la ciudad madre Santa Fe de Antioquia hasta Medellín, con el fin conquistar nuevas tierras y comercializar sus productos. Actualmente el corregimiento conserva la tradición arriera por las dificultades viales y de conexión que se presentan en la zona, razón por la cual la mula sigue siendo el medio de transporte de muchos campesinos que se desplazan los domingos al centro del corregimiento.
Las fiestas de San Sebastián se celebran en honor al patrono del corregimiento; el evento se realiza el 20 de enero y es organizado por los habitantes de la Vereda La Aldea, los cuales se encargan del aseo de la capilla y de elaborar la carroza en la que es cargado el santo durante la procesión que se hace por las calles de la vereda, rezando el rosario y entonando cantos. La procesión termina en la capilla con la celebración de la santa misa, después de la eucaristía se hacen remates mientras la gente disfruta y enciende velas al santo.
Información para turistas
En el corregimiento podrá encontrar los siguientes emprendimientos u organizaciones de base comunitaria que le pueden asesorar en la prestación de servicios turísticos:
Representante Corpalmitur – Turismo de naturaleza, ecoturismo y agroturismo:
Luz Elena Ríos – 3870667 – 3122149384 – 3216364732
Recomendaciones
- Ten a la mano el mapa turístico del corregimiento e infórmate sobre las condiciones topográficas y climáticas de los sectores que vas a visitar, así mismo toma una fotocopia de tus documentos como pasaporte y tarjeta de asistencia médica.
- Usa antisolar incluso si es un día nublado o sin sol y usa zapatos cómodos y ropa cómoda y abrigada, sobre todo cayendo en la tarde y en las noches, la temperatura puede bajar considerablemente.
- Al tratarse de un ambiente campesino, es posible que debas estar preparado para largas caminatas, una buena alimentación e hidratación van a permitirte estar en pie durante todo el trayecto.
- Haz un uso responsable de todos los lugares del territorio; bosques, cascadas, caminos prehispánicos, miradores, entre otros. No dejes basuras en ningún espacio ni atentes contra la flora y fauna que allí habitan.
- Además de una cámara con espacio suficiente en la memoria lleva binoculares para observar de cerca la flora y fauna del territorio.
- Invierte en el territorio y promueve los productos locales con su consumo.